Guije.com El comercio local en lo que va del siglo XX en Historia Local de La Habana.

El comercio local en lo que va del siglo XX. Bandera de Cuba

Guije.com
 Municipios de Cuba
 Biografías Cubanas
 Templos Religiosos
 Cosas de mi Tierra
 Diccionario Guije
 Cocina Cubana
 Cine en Cuba
 Revistas de Cuba
 Libros de Cuba
 Tarjetas Postales
 Filatelia Cubana
 Postalitas Cubanas
 Cubanito
 Cuentos de Antaño
 Fotos de Cuba
 Links
 Literatura Cubana


Ciudades y Pueblos

La Habana
 Túneles
 Fortalezas
 Chinos
 Monumentos
 Parques
 Calles


Historia Local

El comercio local en lo que va del siglo XX
en Historia Local de La Habana
en La Habana
en Ciudades, Pueblos y Lugares de Cuba

Lección 46

“En lecciones anteriores se ha dicho algo del comercio de La Habana y de Cuba en general, y de las trabas y hasta prohibiciones que se le ponían si era con el extranjero.


“La Habana es la ciudad más comercial de Cuba. Su comercio, tanto en volumen o cantidad como en valor, excede grandemente al del resto del país.


“La Habana es el centro de distribución para toda la república de las mercancías procedentes del extranjero, principalmente de los Estados Unidos, tales como automóviles y toda clase de maquinaria, arroz, harina de trigo, papas, manteca, mantequilla, aceite y otras grasas, productos químicos, telas, vinos, carnes saladas, bacalao, pescado en latas, leche condensada y otras conservas alimenticias.


“Muchos productos extranjeros ya no llegan a La Habana en las cantidades que lo hacían hace un cuarto de siglo, por el incremento de la producción de los mismos en el país. Tal sucede con la mantequilla, queso, leche condensada, maíz, huevos, jamones, etc.


“El puerto de La Habana es el lugar por donde van para el extranjero productos de sus fábricas y de las de toda la isla, y también los productos agrícolas: azúcares, mieles, alcoholes, licores, café, tabaco en rama y elaborado, frutas frescas y en conserva, cueros, cordeles, sogas y productos de huerta como habas limas, tomates, quimbombó, berenjenas, ajíes, etc.


“La Habana sostiene comercio activísimo con otros términos de la nación. A todos manda los productos de sus fábricas y de ellos recibe materias primas para sus industrias y cuantos alimentos frescos consume su numerosa población: leche, carnes de res y de puerco, aves, pescados y otros productos del mar; frutas, verduras, raíces y tubérculos alimenticios como papas, boniatos, yuca, guaguí, malanga, ñames, aceites vegetales, como los de Hershey, etc., etc.


“La Habana poseía cuatro Plazas de Mercado al final de la época colonial: el Mercado de Colón; la Plaza del Vapor o de Tacón; la Plaza Vieja o Mercado de Cristina y la Plaza del Cristo.


“El antiguo Mercado de Colón, llamado también del Polvorín, en los momentos en que se escribe este libro se reconstruye, aprovechándose sus bellas arcadas, para convertirlo en edificio para la Biblioteca Nacional. Es interesante ver como entre los montones de cantos y restos de derrumbes, algunos placeros se aferran a sus puestos, ya que el buscarles nuevo sitio ha sido cosa difícil y lenta.


“La Plaza del Vapor o de Tacón, casi en ruinas, aun tiene dedicados a comercios, especialmente a la venta de billetes y pequeños establecimientos de víveres, cafés, etc., sus amplios portales y los locales que a ellos tienen sus puertas. En su patio han buscado acomodo provisional algunos de los desalojados de la Plaza de Colón.


“La Plaza Vieja o Mercado de Cristina se abandonó hace tiempo.


“Que merezca el nombre de Mercado, sin que por otra parte sea cosa notable, sólo existe el llamado Mercado Único, en la calzada del Cerro, poco más allá de la esquina de los Cuatro Caminos.


“Durante la Administración del Presidente Grau, y como sustitutos de los mercados que se habían hecho moda al aire libre, en cualquier parque o paseo, como el de Trillo, por ejemplo, se han construido varios pequeños mercados, llamados libres, de los cuales los primeros han sido los de Vedado y Cerro, muy limpios y cómodos, donde los vendedores, sin pagar renta, hacen sus operaciones durante las horas de la mañana. Durante el resto del día el edificio permanece desocupado y limpio.


“En el Paseo de Carlos III, en el lugar que ocupó la estación del desaparecido Ferrocarril Eléctrico a Marianao, se realizan obras en lo que será un verdadero Mercado Modelo, hasta el cual llegarán los carros de ferrocarril con mercancías de toda la isla.”



Lección 45: La Habana, centro industrial de la República

Lección 47: Cómo viajan los habaneros, y como lo hacían en la colonia



Más información relacionada con los temas tratados en esta lección:
La Avenida de Carlos III en Las Calles de La Habana




| Historia Local de La Habana |
| La Habana | Ciudades, Pueblos y Lugares de Cuba |
| Guije.com |


Correo Electrónico

Gracias por visitarnos


Última Revisión: 1 de Octubre del 2006
Todos los Derechos Reservados

Copyright © 2006 by Mariano Jimenez II and Mariano G. Jiménez and its licensors
All rights reserved