La portada es alegórica en conmemoración al fusilamiento de los Ocho Estudiantes de Medicina. A finales de 1871 un grupo de estudiantes de medicinas, unos 30 a 40 jóvenes, fueron acusados de haber profanado la tumba de un escritor español. Tal profanación consistía de un arañazo en la lápida, que nunca se probó si fueron ellos los que hicieron tal rayón. Pero todos fueron arrestados y acusados del delito.

En aquellos tiempos en Cuba existía la milicia de voluntarios, que ladraban más que los perros y a la hora de la verdad, corrían más que las liebres. Porque fueron los pobres soldados, muchos de ellos jovencitos reclutados a la fuerza, venidos de España los que tuvieron que verle la cara a los mambises. Pero bueno, las milicias querían sangre y se les juzgó a los estudiantes. Las penas fueron severas al máximo, el que mejor salió tuvo que hacer años en prisión. Eso es exceptuando un estadounidense y otro nacido en España, estos dos fueron sacados del grupo antes del juicio. Ocho de los estudiantes recibieron la pena de muerte por el rayón.

El 27 de Noviembre de 1871 los Ocho Estudiantes de Medicina condenados a muerte fueron fusilados públicamente, entre ellos uno que no se encontraba en La Habana el día de la visita al cementerio. Después del fusilamiento, las milicias siguieron su gritería por toda La Habana y mataron a no menos de cinco hombres de la raza negra. Muchas cosas sucedieron en el Nuevo Mundo que no llegaron a saberse en España.

Nota: Presentamos copia de nuestro ejemplar de esta edición de Bohemia con el propósito de compartir nuestra cultura y algunos datos históricos. Tratamos de alejarnos de la política lo más posible, aunque en ciertos casos es imposible ya que es parte de la propia cultura e historia que tratamos de preservar. Lo que sí le aseguramos es que la selección de artículos presentados, y trataremos de llegar a presentarlos todos algún día, no han sido seleccionados basados en ninguna alineación política, sólo en el como fue.